Reflejos en un Espejo Chino

* Francisco J. Vargas


Columna #3: El Cine - Nuevo Opio De Los Pueblos

Las películas y telenovelas son propaganda que compramos, y Hollywood y Televi$a han reemplazado a la Igle$ia en el manejo de las masas.

Usualmente, películas y telenovelas ``populares'' están hechas para manipular a la clase media baja, las que más votan y consumen lo que los industriales producen. Las nuevas y numerosas generaciones van más al cine y ven más televisión que las anteriores iban a misa, por eso la influencia de cine y televisión se va haciendo más fuerte que la religión.

Los productores de cine y televisión alegan que ``las películas no son subversivas,'' pero qué otra cosa pueden decir? Allá el naco que les crea. Aquél que dude que la gente se creé lo que ve en las películas, debería preguntarse por qué entonces la publicidad comercial filmada produce resultados.

De recién que se permitió la exhibición de películas occidentales en China hace apenas una década, un muchacho vio una del Llanero Solitario, salió del teatro y se fue derechito a robar una casa exactamente como lo vio en la película. En Egipto, un hombre vio una película de robos y repitió el método que aprendió del celuloide. Entró a un museo de día y se quedó ahí toda la noche para no activar la alarma. Luego recogió el botín y salió por la puerta muy campante cuando abrieron las puertas por la mañana.

Todo mundo sabe (excepto los ineptos o corruptos magistrados mexicanos en la Corte Suprema), que las películas violentas incitan a la gente a repetir tales actos en la vida real, especialmente los asaltos sexuales y violentos cometidos contra mujeres. Sabemos que hay muchachos que violan y matan mujeres exactamente cual lo ven en películas.

Y otra cosa: A los productores de Hollywood obviamente los crecieron con biberón, pues están obsesionados por los abundantes pechos de mujeres, mismos que enseñan a más no poder en sus películas. Ahora la naquiza latinoamericana exige novias de amplia pechuga.

Así pues, decir que las peliculas no afectan las mentes de los cinéfilos es mentira. Pero el verdadero problema es que la gente no cuestiona los motivos de los productores en cada historia, ni las consecuencias, ni el mensaje oculto en ellas.

Y es que hay mensajes subliminales mucho más peligrosos en las películas que los antes citados. Mensajes que imperceptiblemente lavan el cerebro de los cinéfilos y los manipulan lentamente hacia un particular punto de vista político, ideológico, militar, racial, religioso y étnico. Por eso hoy día los gobiernos tienen la mano metida hasta el hombro en la industria cinematográfica de cada país. Hollywood está, igual que Supermán, ocupado en difundir el American Way of Life. Pero lo mismo promueven activamente su cultura otros países: China, Rusia, Inglaterra, Francia, etcétera.

Excepto en México, porque aquí los ``productores'' promueven pura mierda intelectual, que es exactamente lo que tienen en sus cabezas: Cintas de borrachos, cabareteras, verduleras, jotos, malos cantantes, y luchadores enmascarados. Si usted ve películas hechas hasta 1950 notará que básicamente eran entretenimiento. Pero luego Hollywood se convirtió en vehículo de la propaganda gringa y la cosa cambió. Luego, conflictos raciales como el de Watts provocaron el arribo de negros y orientales, pero también incrementó la caída en la aceptación social en los USA de méxico-americanos, situación racial reflejada en películas desde entonces.

Siendo judíos los productores en el mundo occidental, incluyendo México (excepto en el Oriente y en India), las películas reflejan una pronunciada discriminación hacia árabes, mexicanos y demás gente de piel no blanca. Por otro lado, el holocaustojudío no es el único ni el peor genocidio de la historia, pero los directores de cine así lo publicitan. Y se olvidan convenientemente de genocidios como el de la matanza de nativos en el Nuevo Mundo. Genocidio que no ha parado desde hace quinientos años, y al que mucho contribuyeron y contribuyen los judíos. Cristóbal Colón fue judío, y muchos de los conquistadores -digamos Hernán Cortés- eran conversos al catolicismo pero judíos de raza. De eso no se dice nada en tales películas.

En fin, allá quienes encima pagan por la propaganda. Pero el público comprador de boletos sigue el punto de vista de unas cuantas personas. Por ejemplo. Las peliculas promueven el mito de que ``la raza blanca es superior'' a las demás. Y digo mito porque la estrategia militar china dice que ``Nadie nace genio,'' todo es cuestión de la calidad de los maestros en cada país.

Sin embargo, en las películas nos quieren hacer creer que los blancos son genéticamente más listos. Ja, ja, Hasta en telenovelas mexicanas (y venezolanas, brasileñas, etcétera), al igual que en las películas de Hollywood, promueven actores judíos güeritos y rubios (oxigenados, pero rubios), presentados al espectador como ganadores, gente de éxito. La indiada que sigue esos bodrios se siente inmediatamente inferior racial y mentalmente, pues las masas son fácil de engañar por productores canijos.

No contentos con eso, en las películas cambian la Historia a placer y siempre a conveniencia de los productores. Por eso en el mundo occidental los héroes son siempre de raza blanca, y buena gente. Últimamente Hollywood está produciendo películas con héroes negros debido a que la raza blanca los esclavizó por siglos y les remuerde la conciencia. (Ahora los negros quieren desquitarse en mexicanos tontos). Pero para Hollywood, el resto de razas somos tontos.

Con la población mexicana en USA de casi el diez por ciento del total, Hollywood no promueve héroes mexicanos. Aún si los hay en la vida real, al llevar su historia al cine ponen actores de otros países a interpretarlos (el actor de La Bamba es filipino, o algo así; a Selena la interpreto una cantante caribeña). La cosa es no darles modelos mexicanos a los chicanos. Que éstos adoren a los héroes güeros o negros pero nunca a prietitos.

Y si Hollywood presenta actores hispanos, éstos deben ser criollos, no nativos. Actores ``mexicanos'' en Hollywood son todos criollos: Montalbán, la Del Río, la Hayek, Cantinflas, etcétera. Y es que todas nuestras ``figuras'' son criollos por todos lados: Luismi, la Juanga, Vicente, Polo Polo, la Félix, Negrete, etcétera. Hasta el técnico de la Selección Mexicana de fútbol es habitualmente criollo. En Hollywood filmaron una tira cómica, El Zorro, pero con Banderas, actor español, pues el personaje es originalmente criollo. Si hubiera sido de mexicano normal, no la filman.

Así que las grandes producciones de afamados estudios y directores venden propaganda, y son tan listos que se la compramos. En ellas denigran a los mexicanos y así nos las tragamos, que para eso nos han entrenado muy bien los criollos en el Gobierno: Para ser un pueblo de tontos aquí y en el extranjero. Por eso los gobernantes mexicanos nunca protestan por el contenido racial de películas y telenovelas. Ellos no son nativos, sino gachupines.

PRINCIPIOS DE DINERO:   ``Se suicidó un científico ruso por no tener futuro su carrera.'' Lo escalofriante de tan escueta noticia, es que con más de mil millones de desempleados en el mundo, de manera que seguramente esa víctima del desempleo no será la última.

El desempleo a nivel nacional e internacional crece incontenible, y las plazas de trabajo existentes son cada vez más escasas y mal pagadas pues la oferta excede a la demanda. Los países desarrollados levantan murallas cada vez más altas a la inmigración precisamente para proteger sus fuentes de trabajo en beneficio de sus propios ciudadanos.

En México hay trabajo para los jóvenes en las maquiladoras de ciudades fronterizas como Tijuana, pero es un tipo de empleo con futuro incierto y de beneficios económicos limitados. ¿Qué hacer entonces? Pues una solución para quiénes están desconcertados por la situación económica que padecemos sería aplicar algunos de los más prácticos principios financieros chinos a la situación.

Sí, porque ya estará usted enterado de que los más avezados comerciantes europeos, árabes y judíos usan en el comercio las técnicas financieras aprendidas por ellos en China en los últimos dos milenios, pero adaptadas ya al mercado occidental. Los chinos tienen un largo historial de invenciones para agilizar transacciones financieras mayores. Hace nueve siglos, por ejemplo, inventaron los billetes para evitar el peso oneroso de monedas de metal, invención que Marco Polo llevó consigo en su regreso de China a Italia.

Ya habían inventado los chinos el ábaco, eficiente calculadora imprescindible en los negocios grandes y pequeños y aún en uso diario en China. Pero lo mejor de todo es que desarrollaron varios métodos para hacer fortuna legal y rápidamente. Cada método tiene, por supuesto, sus correspondientes principios financieros, y los hay para todos los intelectos. Desde los más sencillos y que no necesitan mayor explicación, como el que reza, ``No saber principios de dinero es peor que ser pobre,'' hasta los que contienen la sutil estrategia financiera necesaria para dominar el mercado en un pueblo, una ciudad, un país, y hasta en el mundo entero.

Si duda usted de la efectividad de estos métodos, mire a su alrededor y notará que el dinero oriental (y los orientales) ha infiltrado ya prácticamente todos los mercados mundiales. Ser rico es, pues, ventajoso. En China se dice que "Donde hay dinero hay (más) felicidad," pues "Felicidad es tener lo que se desea."

El deseo de tener dinero en abundancia es deseable, pregúntele a los políticos mexicanos. Claro que hay cosas que el dinero no compra. Pero Sin dinero, créamelo, se compra aún menos.

La riqueza, quiérase o no, influye en la vida de todos (obsrve los lujos de los hobbi$pos) y su poder puede convertir a una persona común y corriente en alguien admirado por pobres y ricos. Y "Producir dinero es mejor que ganarlo." Sólo recuerde que ``Oro hay en todas partes,'' y que la mayoría de la gente tiene ojos pero no ve las oportunidades.

De acuerdo a esa fórmula, "Hay oro hasta en los libros," pues llevan al estudiante a disfrutar eventualmente de una vida mejor al convertirse en profesionista. Pero también existen maneras rápidas de hacer dinero sin invertir mucho, como la pesca, por mencionar un método. Con una lancha y una red usted puede cosechar en el mar lo que jamás sembró. O sea, ¡GANANCIA PURA!

Esa fórmula, variándola y adaptándola de acuerdo a cada situación, es buena para aquéllos que desean ganancias rápidas, para los que no pueden o no quieren ser empleados de otros, o para aquéllos que emigran a países desconocidos para ellos.

Sólo hay que observar dónde hay dinero y ganancias fuertes. Los gobiernos hacen lo mismo con los impuestos, el turismo, el petróleo, la madera y metales preciosos, etcétera: "Cosechan sin sembrar," y ``Se hacen ricos sin capital.'' Por eso la política es una de las formas más tradicionales de hacer fortuna. No necesita mucha inversión y "Siempre será mejor administrar el dinero ajeno," en este caso el ingreso nacional. Si lo dudan, pregúntenle a los secretarios de Hacienda y y pandillas de gobernantes.

Pero "Hasta con un dólar puede usted empezar un negocio si vende lo que la gente necesita desesperadamente," especialmente comida. Se dice en China que ``El dinero está en la comida'' y obviamente tienen razón. Todo es cuestión de pensar despacio y aplicar los principios adecuados para que el dinero llegue a sus manos fácilmente.

EL "TERCER OJO" MILITAR:   En cuestión de conflictos, personales o entre países, los aliados no son siempre confiables. Según la estrategia militar china, ``El enemigo descubre nuestros planes cuando alguien nos entrega.'' Tal le pasó a Argentina durante el conflicto por Las Malvinas.

Al principio del conflicto argentino-inglés, Rusia ofreció ayuda informativa de satélites a Argentina, pero Kissinger y oficiales militares de USA estaban mediando el conflicto, así que los generales argentinos la rechazaron. Después, los buques de guerra de USA ayudaron a los ingleses y no a los argentinos. Sin embargo ésa no fue la mayor traición a unos generales que nunca supieron el significado del principio militar de Sun Tzu que dice: ``Conócete a ti mismo.''

La mayor traición a los argentinos vino de Francia, que a la sazón proveía de aviones militares a la Argentina. Los argentinos se autonombran ``los europeos de Latinoamérica.'' Se creen franceses o italianos, especialmente la clase gobernante que no se ha mezclado mucho con los nativos. Hasta ser descendiente de inmigrantes españoles tiene mala fama en Argentina. A resultas de tal admiración por lo europeo, los argentinos se creyeron que los franceses eran sus aliados y rehusaron mezclarse militarmente con otros países latinoamericanos, pues se creían superiores. Todo porque americanos y franceses les daban instrucción y avioncitos a sus Fuerzas Armadas.

Pero oh, sorpresa. Cuando empezó la refriega entre ingleses y argentinos, el presidente de Francia, Mitterrand, llamó a la Thatcher y le ofreció su ayuda para derrotar a los argentinos. Primero que nada, Mitterrand dijo a los ingleses cómo neutralizar la eficiencia del cohete Exocet que Francia vendió a los ches. Este cohete tiene un sofisticado sistema de computación que lo hace muy efectivo, y Mitterrand entregó a los ingleses el sistema completo de operación, pues a los argentinos sólo les habían enseñado la mitad del mismo.

Francia también entregó información técnica de otras armas que le había vendido a Argentina, especialmente de los aviones caza Mirage y Etendard. Puso además a disposición de pilotos ingleses escuadrones de tales aviones para que supieran cómo funciona su sistema de radar - los franceses vendieron aviones y radares a los ches, pero no las frecuencias de éstos -contra baterías antiaéreas y pudieran derribar fácilmente los cazas franceses que tenían los argentinos.

Esa información también permitió el sabotaje al radar de los aviones franceses en territorio argentino. Y por si fuera poco, Mitterrand se puso, diplomáticamente hablando, del lado de Inglaterra y decretó embargo militar sobre Argentina. Para rematar, los franceses también intervinieron los teléfonos del agregado militar argentino en París para que los ingleses se enteraran qué armamento quería comprar el militar a toda prisa en el mercado negro. Hasta el armamento similar que había comprado Perú a Francia por esos días, se lo retuvieron los franceses con mil argucias, no fuera que se lo prestaran a los argentinos.

Los ingleses dijeron después agradecidos que, si Argentina hubiera tenido más cohetes franceses en vez de los cinco que utilizó, habría ganado la guerrita. Canijos los franchutes, ¿verdad? Pero qué buena lección militar para los presumidos argentinos. Evidentemente los vendedores de armas les juegan el dedo en la boca a sus compradores latinoamericanos tontos.

Lección también para el Ejército mexicano, cuyo armamento es totalmente extranjero: No lo podrán usar contra países del primer mundo o sus aliados, porque se corre el riesgo que los vendedores del armamento les pasen a los otros información técnica vital que no dieron a los nopales de casco verde con el armamento. Igual lección militar para los demás ejércitos tercermundistas. Más vale que aprendan a hacer sus propias resorteras, porque usar las de otros países es riesgoso.

Eso sí, júrelo que ningún generalete mexicano aprenderá la lección. Y es que ellos compran armas para matar disidentes políticos e indígenas, no para librar guerras con otros países. Son matones, no tarugos.

METAFÍSICA CHINA:   Dicen los científicos que ``la existencia de espíritus es charlatanería pura.'' Con eso pretenden poner punto final al debate sobre la existencia del más allá. Sus palabras me recuerdan un sencillo consejo de un maestro chino: ``Si no sabes de lo que hablas, mantén tu boca cerrada.''

Los científicos niegan la existencia del más allá, algo en lo que se han pronunciado positivamente eminencias como Lao Tzú y Confucio. Y ni por un momento podría yo pensar que los científicos parlanchines son mejores hombres que los dos primeros. Pero, con tal de ganarse la vida los más siempre hablarán de lo que no entienden.

Lo primero que debemos aclarar es que ciencia y religión no deben mezclarse. El conocimiento humano está dividido precisamente en estas dos ramas: La religión es intuitiva y abstracta, mientras que la ciencia es práctica y pragmática. No se puede entonces explicar la ciencia con los principios de la religión, ni los de la religión con los de la ciencia. Son como las puertas y ventanas de una casa: Cada una tiene una función importante y no debe interferir con la otra.

Únicamente a los científicos se les ocurre, debido a su avaricioso afán monopólico, intentar ser ventana y puerta simultáneamente. En otras palabras, habrá que pedirles a los científicos que se dediquen a lo suyo, pues de acuerdo a los principios chinos de ocultismo, El hombre no puede usar solamente el conocimiento científico para cambiar los designios celestiales. Solamente el conocimiento oculto de los rituales produce cambiosmetafísicos, y en este campo no tiene nada que hacer la ciencia.


* Master, Estrategia Militar China

E-mail: visionpf@direct.ca


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Copyright © 1998, Francisco J. Vargas